Comienza la primavera de Praga.

Durante la guerra fría, Checoslovaquia tuvo un periodo de liberación política llamado la Primavera de Praga. Este periodo se dio gracias a un movimiento político que buscaba avanzar en el socialismo de una forma menos autoritaria.

Su fin era modificar aspectos del régimen impuestos por la Unión Soviética hacia una forma no totalitaria de socialismo, permitía la existencia de distintos partidos políticos, libertad de prensa y huelga, la formación de sindicatos, etc. La Primavera de Praga duró desde el 5 de enero hasta el 20 de agosto de 1968, día en que la unión soviética y sus aliados del pacto de Varsovia invadieron Checoslovaquia.

Esta rebelión tuvo diferentes impactos culturales, contribuyendo al crecimiento de las ideas eurocomunistas en Occidente, influyendo así en otros movimientos como la Primavera de Pekin en China o la Primavera Croata en Yugoslavia, entre otros eventos modernos.